Objetivo
En este estudio se utiliza un marco de modelización para evaluar el posible impacto en las enfermedades cardiovasculares de la estrategia REPLACE de la Organización Mundial de la Salud (OMS) destinada a reducir el consumo de ácidos grasos trans de producción industrial (IP-TFA, por su sigla en inglés), en Costa Rica.
Método
Se utilizó el modelo de macrosimulación de los ácidos grasos trans para calcular la reducción de la mortalidad por enfermedades cardiovasculares en tres situaciones hipotéticas de regulación: 1) establecer un límite del 2% de contenido de IP-TFA en los aceites y grasas y del 5% en otros alimentos; 2) establecer un límite del 2% de contenido de IP-TFA en todos los alimentos; y 3) aplicar una prohibición total de los aceites parcialmente hidrogenados.
Resultados
Los cálculos realizados con el modelo muestran que la aplicación de un límite del 2% de contenido de IP-TFA en todos los alimentos podría prevenir o retrasar aproximadamente 128 muertes anuales (3,0% de la mortalidad por enfermedades cardiovasculares), mientras que una prohibición total de los aceites parcialmente hidrogenados podría evitar alrededor de 215 muertes al año (5,0% de la mortalidad por enfermedades cardiovasculares). Desde el punto de vista económico, la prohibición de los aceites parcialmente hidrogenados podría generar un ahorro anual de aproximadamente 2,1 millones de dólares estadounidenses al reducir las pérdidas de productividad asociadas a la mortalidad prematura.
Conclusiones
La aplicación de la estrategia REPLACE de la OMS podría reducir de manera significativa la mortalidad por enfermedades cardiovasculares, y mejorar la salud y la productividad económica de la población. Estos resultados aportan una evidencia sólida para abogar por medidas regulatorias en Costa Rica y otros países de la Región de las Américas a fin de eliminar el contenido de IP-TFA en los alimentos.
