Objetivo
Describir la aplicación de una estrategia para promover las razones para vivir y evaluar su impacto en los síntomas agudos de salud mental, la discapacidad psicosocial y la percepción de los servicios de salud.
Método
Se usó una metodología cuasiexperimental que incorpora métodos de un estudio de implementación híbrida de tipo I. Se aplicaron la Escala de Caldas, el Cuestionario de autonotificación de 20 ítems (SRQ-20) y la Escala de carga del cuidador de Zarit a personas con antecedentes de trastorno mental y pensamientos suicidas, antes y después de la implementación de la estrategia "Razones para vivir", para determinar la discapacidad psicosocial asociada a los trastornos mentales y la carga del cuidador.
Resultados
La estrategia "Razones para vivir" ha modificado la relación entre la calidad y la percepción de los servicios de salud y la discapacidad psicosocial asociada a los trastornos mentales. Se observó una magnitud del efecto grande para las variables de discapacidad laboral (r = 0,68), discapacidad social (r = 0,55), adhesión al tratamiento (r = 0,71) y percepción sobre los servicios (r = 0,51), con una magnitud del efecto moderada por lo que respecta a los síntomas agudos de salud mental (r = 0,41).
Conclusiones
La aplicación de la estrategia contribuyó a la participación institucional en la promoción de la salud mental, y a la mejora de los síntomas agudos de salud mental y de algunas variables de discapacidad psicosocial. Las estrategias de promoción de la salud mental pueden integrarse en marcos de aplicación para facilitar su desarrollo en contextos sociopolíticos específicos.